El alza de los carburantes deja sin margen a los camioneros: llenar el depósito ya cuesta más de 2.000 €
Sin márgenes y asfixiados. Así se sienten los camioneros por la subida de los precios de los carburantes que desde octubre de 2020 acumula una subida de hasta el 35%, lo que ha provocado que llenar el depósito ya cueste más de 2.000 euros. Una situación que ha provocado que las empresas del sector registren importantes problemas para poder actualizar el precio de sus servicios y que, incluso, muchas se vean obligas a cesar su actividad por el alza de los costes fijos.
«Son muchas las empresas con problemas para poder actualizar el precio de sus servicios en función de las subidas constantes de los precios de los combustibles y, por tanto, de no corregirse esta tendencia en el mercado en los próximos meses, habrá transportistas que se vean obligados a cesar su actividad por el aumento de los costes fijos, ante la reducción de los márgenes», explica el secretario general de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), José María Quijano, en conversaciones con OKDIARIO. Además, puntualiza que «otras muchas que ya han decidido parar sus flotas de camiones».
En concreto, Quijano calcula que «la subida del gasoil desde octubre del 2020 ha superado, en algún momento, hasta el 35%, lo que supone un aumento de los costes de explotación de un vehículo pesado en torno al 10,5%». Un problema similar están sufriendo las empresas que apostaron por camiones propulsados por gas, donde el incremento de los precios está haciendo inviable su utilización, que podría alargarse en el tiempo por la crisis entre Ucrania y Rusia.
Preguntado por el dinero que desembolsa un camionero en carburantes, el secretario general de la patronal de los transportistas asegura que «sobre una media de 120.000 kilómetros recorridos al año, y un consumo medio de 34 litros a los 100 kilómetros, con el precio medio de diciembre (1,3469 euros/litro) publicado por el Ministerio de Transición Energética, supondría un importe mensual de 5.580 euros al mes». Un montante que no todas las empresas pueden soportar en épocas de crisis.
Así, un vehículo pesado articulado, que puede repostar entre 1.000 y 1.500 litros lo que le da una autonomía para recorrer entre 2.941 y 4.412 kilómetros por depósito, desembolsa entre 1.347 y 2.020 euros para poder llenarlo. Un precio nunca visto hasta la fecha.
Sánchez da la puntilla a los camioneros
Ante este aumento de los costes por los carburantes, los camioneros piden al Gobierno de Pedro Sánchez que se frene la implantación de la euroviñeta. Esto es pagar por usar las carreteras. Una petición que parece complicada de atender, ya que es uno de los requisitos que ha impuesto Bruselas para que España reciba los fondos europeos.
Desde la patronal argumentan que «en España se paga sobradamente por el mantenimiento de las carreteras a través del pago de impuesto por el consumo de combustible». Concretamente, los ciudadanos desembolsamos 19.000 millones de euros al año.
El Ejecutivo llegó a un acuerdo con los transportistas en el mes de diciembre -al borde de la convocatoria de un paro patronal en plena campaña de Navidad- para que desde el Ministerio de Transportes no impongan el pago por uso de las carreteras sin consultarles.